No es de poco valor
Denominarse legionario
cuando estamos en un blog
de un héroe antiromano
Se os saluda, Legionario
Se os da la Bienvenida
espero leer a diario
como va vuestra vida
No os preocupéis de las críticas
que seguro sufriréis
ni siquiera las más ínfimas
seán menos de seis.
Cuidado con el escudo, ladrón
que aquí luchamos cara a cara
aunque seguro que algún cabr...
os ataca por la espalda
9 comentarios:
Ave pópulo! Moriturem salutatem.
Empecé mi vida en este mundo como cualquier mozo, un poco perdido y descarrilado, sólo tenía música en mi cabeza y me encontré de repente rodeado de gente armada hasta los dientes que sólo querían “probar las espadas de sus amigos” y batir “no se que huevos”. Así es que decidí equiparme yo también pero como no soy nada hábil con el florete, ni me atrae el alto mando, preferí pertrecharme con un escudo y una lanza hasta que capease el temporal (El que vale, vale, y el que no, a la legión).
Siento haber comenzado este “Diario del Legionario” tan tarde, pero es que en mi campamento no tenemos precisamente maquinaria de alta tecnológica y además fuimos destinados a Lusitania. Pero por supuesto llegamos tarde, ya no se llama Al-Grav-Al-Andalusí, ni siquiera Lusitania, ahora se llama Algarbe y las termas de Monchique son un centro donde se apuestan fichas de colores en vez de sestercios. “Apúntate a la legión” me dijeron, “¡ Verás mundo!”.
Añadiré que encontré el valor que me faltaba para alistarme mientras pensaba en cómo dar un homenaje al Dios que creo este mundo (o a su brazo en la Tierra) y de paso recordar un poco los orígenes y propósitos de este imperio. No he querido poner una foto con mi uniforme de gala por que estaba seguro que alguno terminaría “toqueteándose la espada” o lo que es peor queriendo “probarla mía”.
Espero no tener que hacer muchas guardias en la garita, a ver si así saco algo de tiempo para poder contaros todas las grandes acciones de mi destacamento, ya sabéis: pelar patatas, limpiar letrinas, cavar trincheras,... esas típicas acciones que los ilustres no cuentan en sus novelas, precisamente por eso, por ser novelas.
Sed bien recibido en este nuestro humilde cuaderno de anotaciones, estimado legionario, y sabed, que, de soldado a soldado, en mi tendreis un buen camarada, siempre que no sienta atacada mi persona, ya que, como buen español, no suelo aceptar de buen grado ni una sola alusión fuera de lugar a mi persona sin echar mano de la toledana.
No sirva esto de amenaza para vuestra merced, ya que, de primeras, todos son dignos de mi completa confianza.
Buen viaje, estimado Legionario.
Espero que el hecho de que el blog se nos llene de militares no signifique que el aire de comprensión, amistad, tolerancia y respeto que nos ha caracterizado se rompa. Sólo faltaba que el romano adorador de Marte se aliara con Alatriste (adorador del Vino) y rompieran la concordia que ha existido desde los orígenes en esta bitácora.
Que sepa nuestro estimado fraile, que si alguién rompe el buen ambiente de este agora de entendimiento, eso no es otro que su "camarada de correrias", el espadachin de medio pelo (demostrado en el video que nos ha colgado, donde es derrotado por un pirata que antes era un mero peón en rural, a las ordenes de una doncella), que su dirigirse a los demás de forma provocativa, no hace más que dejar en mal lugar el noble oficio de espadero, pues eso es lo que es, un mero espadero con infulas de espadachin, y que no llega a gregario de piratas.
He dicho. Con Dios
POr cierto, he colgado en el blog unos vídeos de la Historia de un chaval llamado ErnestoNtolculo. El orden es Ernesto Camela 4, ernesto camela 2 y ermesto camela 5 (falta alguo pero no lo encuentro. Este sí que es un espadachín, caeme bien el chico. Os recomiendo el audio.
Supongo que a esos se referirá el mentiroso de Alatriste para difundir una imagen penosa de mi mismo, pero no sé a que se refiere (claro, que tampoco es un hombre de letras)
Creo deducir de vuestras lineas, que la intención que las mismas persigue es la de atacar a mi persona, denominandome iletrado, pues bien, sea ésta la única vez que esté en conformidad con alguna de las palabras que vomitais. En otro de los apartados de nuestro diario, me definís de una forma tan acertada que se diría la habeis tomado prestada de Fray Guillermo, ya que, lamento recordaros que vos(espero que no os ofenda el voseo) anduvisteis de taberna en taberna, igual que yo, más atento a las ilusiones que destilaba el no siempre agradecido licor de Baco, hasta que un menesteroso de tres al cuarto os tomó bajo su ala protectora, junto a un gigante, para dedicaros a la vida criminal, asaltando caminos y secuestrando princesas.
No pretendais insultarme por ser un soldado que mata el tiempo entre levas de la misma forma en que un país como el mio aguantaba el tirón intentando mantener, más allá de nuestras fronteras, lo único que nos quedaba, el orgullo.
Sí, tenéis razón, no soy letrado (en ninguna de sus acepciones), pero cuando hablan los aceros, las palabras sobran, es más, estorban.
Quede con Dios, a pesar de todo.
Quede dicho, odiado Alatriste que en los vídeos que el pío Guillermo ha colgado solamente queda de manifiesto la valentía y el arrojo de un joven curiosamente parecido en sus facciones a un servidor. También me permito recordaos que si bien es cierto que durante una época anduve perdido entre los brazos de Dionisos, lo hice unicamente pòr no encontrar rival a mi espada, y que con mucha fuerza de voluntad y una temporada en Proyecto Hombre lo superé. No es así vuestro caso, matón irresponsable, que no habéis dejado de volcar copas con el codo y de mojaros el mostacho en tal licor.
Y así es y así queda dicho.
aprovecho este nuevo espacio en nuestro blog para dar la bienvenida al amigo legionario, gran conversador, insigne viajero, políglota de postín y decubridor de nuevos e ignotos talentos musicales, no aptos para paladadares clásicos como el mío. Ave César!
No sabéis como me complacen vuestras bienvenidas, los halagos del Sr. D. Cesar (hombre al que tengo por bien ilustrado y de sano juicio) y el amparo de ciertos espadachines de los que he oído hablar de sus hazañas por todo el mundo. Probablemente necesite de su protección, ya que suelo salir mal parado de cualquier enfrentamiento con cierta aldea gala.
Al amigo fraile agradezco su infinita paciencia y sabiduría, sin la cual no me encontraría aquí, lugar donde he de reconocer me encanta entrar cuando encuentro tiempo y lugar.
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